Pamplona, a pie de calle
Vista Bella, el nuevo bar restaurante con bellas vistas a la cuenca de Pamplona
La hostelera Jui Jui Zhan y su marido, Iván Alfonso, han inaugurado en Echavacoiz norte un establecimiento moderno y acogedor para 80 comensales

Actualizado el 15/03/2025 a las 06:58
Un nombre que trae recuerdos de infancia de miles de pamploneses, de celebraciones familiares y paseo por la Taconera. Vista Bella vuelve a tener vida, pero no en el parque con vistas al monte San Cristóbal, sino en el barrio de Echavacoiz norte, con vistas a la sierra de Alaiz y del Perdón. Es el nuevo bar restaurante inaugurado el lunes 3 de marzo en la avenida de Pamplona 57, en uno de los bloques de nueva construcción en el límite de Barañáin.
“Le dimos muchas vueltas al nombre y es algo que decidimos apenas un mes antes en una reunión con el arquitecto”, explica la dueña del restaurante, Jui Jui Zhan, hostelera nacida en China pero que lleva 25 años en España. Casada con el enólogo Iván Alfonso, Jui lleva 19 años al frente del bar Alegría de Barañáin. Ahora han decidido dar el salto a un nuevo proyecto “desde cero” y en el que llevaban trabajando dos años.
El resultado es un moderno restaurante para 80 comensales, diseñado por el estudio de arquitectura de Enrique Kahle, de aspecto industrial pero con un toque acogedor gracias a unas persianas de madera del estilo de las casas de pueblo. La cocina es abierta, la barra de azulejos entre modernos y vintages y la iluminación la dan unas lámparas de diseño de estera. El establecimiento da a la avenida y al paseo peatonal de la trasera, con grandes cristaleras y vistas a lo que será el PSIS del tren de alta velocidad. “Aquí todo es bonito y sabe mejor” es el eslogan que Jui Jui e Iván han elegido para el bar restaurante.

El menú del Vista Bella es de gastronomía tradicional. Hay una extensa barra de pinchos y de tortillas rellenas, un menú del día y menú de fin de semana. Las raciones y bocadillos son una opción para tardeos y cenas. Los asados y las paellas por encargo están entre las especialidades. “Todo es casero. Tenemos a un cocinero, Miguel, muy amigo, que se ha unido al equipo. Se le da muy bien el gorrin y el cordero asado, pescados al horno”, comenta Jui Jui. En total, el establecimiento cuenta con un equipo de once personas.
La fiesta de inauguración fue especialmente animada. Como manda la tradición china, hubo la danza del león, que debe comerse una lechuga para dar suerte. Chuchín Ibáñez animó la velada con sus rancheras y un experto jamonero dio buena cuenta de dos piezas ibéricas. Hubo también barra de gin tonics.

“El local se llenó con amigos, familiares, gente del barrio y con los profesionales que han colaborado en este proyecto, a los que estamos muy agradecidos con el resultado”, expresa Jui Jui.